Hoy se cumplen 20 años de que el mundo
perdió a una de la mentes más claras de la historia de la ciencia. Y no porque
los demás científicos sean unos obtusos, sino porque su visión de la ciencia
era hacerla llegar a cada rincón del planeta, idea que le valió una mala
recomendación para permanecer en Harvard, porque sus colegas, y en especial su
mentor, Harold C. Urey, creían que esa
idea era sólo un vehículo para su propia promoción. En ese tiempo se pensó que había sido por la pasión que profesaba a
la exobiología, ya que la búsqueda de vida extraterrestres carecía de
importancia en ese entonces, sin embargo, ni el propio Sagan supo los motivos
hasta 5 años más tarde, cuando Urey se disculpó con él por aquella mala recomendación.
En 1966, Sagan, consiguió por primera vez
cierta modesta atención nacional con
su libro (escrito con el astrónomo ruso I. S. Shklovskii) Vida Inteligente en el Universo. Al
año siguiente, Sagan escribió un optimista
artículo
sobre el potencial de la vida en los planetas para NationalGeographic,
además de algunas breves apariciones
en televisión. Ya era evidente para algunos que Sagan buscaba un papel más amplio que el de investigador
académico, una preocupación que probablemente contribuyó a la negación de la
tenencia en la Universidad de Harvard en 1967. Los estudiantes lo
querían, pero algunos colegas se molestaron
por lo que percibían como auto-engrandecimiento y un querer complacer
al público. A diferencia de Harvard, la Universidad de Cornell estaba
buscando profesores con un potencial para el estrellato, y le proporcionaron a Sagan el sólido trampolín académico que necesitaba para su
futuro ascenso a la fama y la fortuna.
Sagan dio conferencias e investigó en la Universidad de Harvard hasta
1968, cuando se trasladó a la Universidad de Cornell en Ithaca, Nueva York,
después de serle negada la tenencia en Harvard. Se ha sugerido que a Sagan se
le denegó la tenencia en parte debido a su promoción científica publicitada,
que algunos científicos percibieron como auto-promoción; Harold C. Urey, en 1967,
escribió una carta al comité de tenencia recomendando contra la tenencia de
Sagan. Después se convirtió en profesor titular en Cornell en 1971 y dirigió
allí el Laboratorio de Estudios Planetarios. De 1972 a 1981, Sagan fue director
asociado del Centro de Radiofísica e Investigación Espacial (CRSR) de Cornell.
No fue sino hasta
cinco años después de su salida de
Harvard que
Sagan supo por qué había sido rechazado. Uno de sus mentores en la Universidad
de Chicago, el premio Nobel (Química-1934) Harold Urey, le
había dado referencias negativas, describiendo los prolijos trabajos de investigación de Sagan como
a menudo inútiles y no dignos de confianza. Urey
más tarde cambió de opinión y se disculpó, pidiéndole
perdón y su amistad. "He estado completamente
equivocado", escribió el 17 de septiembre de 1973. "Admiro las cosas
que haces y el vigor con el que las
afrontas."
Para entonces, por supuesto, Cornell ya había arrancado el mayor intercambio de
talento de Massachusetts a Nueva York desde
que los Medias Rojas vendieron a Babe Ruth a los
Yankees en 1920.
Algunos pretenden adjudicar esa negativa de la Universidad de Harvard a
que Sagan hablaba de extraterrestre; ESTUPIDEZ que de tanto repetir en el curso
de los años se ha creído hasta el tuétano el inefable e infausto Maussan.
Hay muchas formas de propagar mentiras, una de ellas es torcer la verdad, y tal vez esa práctica estuvo presente a la hora de diseñar el logotipo del programa dominguero de este periodista venido a ufólogo de feria.
Hoy, entre los seguidores de la obra de Carl
Sagan y los amantes de la ciencia y el pensamiento crítico, la fecha de su aniversario luctuoso se ha convertido
en el "Día mundial del Escepticismo" o “Día mundial contra el avance de las Pseudociencias”, propuesto por vez primera el 20 de diciembre de 2009 por Ezequiel del
Bianco, autor del blog "Proyecto Sandía".
En ese artículo se instaba a los autores
de blogs de todo el mundo a dedicar ese día a la lucha
contra las pseudociencias, escribiendo un artículo alusivo al
tema.
Hoy, a falta de tiempo, quise rendir este pequeño homenaje desenmascarando
esas falsas afirmaciones del ufólogo de la tele, y al mismo tiempo recordar esa
convocatoria de Proyecto Sandía, para que el
esfuerzo no quede en letra muerta y podamos algún día acabar con tanto charlatán
que llena la internet, auto-proclamándose
grandes investigadores o los sujetos que cambiarán la historia reescribiéndola
con sus afirmaciones peregrinas.
Los invito a leer el artículo dando clic a la imagen:
O visitar el canal de Proyecto Sandía en Youtube, también dando clic en la imagen:
O visitar el canal de Proyecto Sandía en Youtube, también dando clic en la imagen:
Celebremos la memoria de Carl desterrando un charlatán al día, o por
lo menos leyendo la obra que a lo largo de los años se sumó al acervo cultural de
la ciencia.
Referencias:
Carl Sagan's Life and Legacy as Scientist, Teacher and Skeptic.
The Sagan Files.
American National Biography Online.
Proyecto Sandía.
Wikipedia - Inglés.
10 Pistas para reconocer a un charlatán.
Leopoldo Zambrano Enríquez
Informe U. F. O.
Monterrey, Nuevo León. México.